80€
30 - 45 minutos
Primera toma de contacto con nuestra ginecóloga para valorar síntomas, realizar exploración física y establecer un plan diagnóstico o terapéutico. Un espacio seguro para resolver dudas sobre menstruación, fertilidad, molestias íntimas, menopausia o salud sexual.
"Diagnóstico personalizado Abordaje de síntomas habituales Derivación a pruebas o tratamientos si es necesario"
No se requieren cuidados posteriores. En algunos casos se pautan analíticas, seguimiento o pruebas complementarias.
La consulta ginecológica representa un espacio clave en la salud integral de la mujer. Más allá de ser una primera toma de contacto con la especialista, constituye un momento para abordar de manera personalizada todas las inquietudes relacionadas con la salud reproductiva, sexual y hormonal. En Clínica Olive, la consulta está diseñada para ofrecer un entorno seguro, confidencial y cómodo, donde cada paciente recibe atención profesional y un diagnóstico individualizado.
Durante la visita inicial, la ginecóloga realiza una evaluación completa de los síntomas, revisa antecedentes médicos y familiares, y realiza la exploración física adecuada, que puede incluir palpación abdominal, revisión de mamas y examen ginecológico. Este procedimiento permite establecer un plan diagnóstico o terapéutico adaptado a cada mujer, priorizando la prevención, el bienestar y la detección temprana de posibles alteraciones.
El objetivo principal de la consulta es garantizar la salud integral de la mujer en todas las etapas de su vida. Esto incluye desde la adolescencia hasta la menopausia y más allá, abordando aspectos como:
Seguimiento menstrual y hormonal
Se evalúan ciclos irregulares, dolor menstrual, sangrados anormales o alteraciones hormonales. La información recopilada permite identificar posibles trastornos como dismenorrea, síndrome de ovario poliquístico o alteraciones de la ovulación, y diseñar un plan de seguimiento o tratamiento personalizado.
Salud reproductiva y fertilidad
La consulta proporciona orientación sobre fertilidad, planificación familiar y métodos anticonceptivos. Se valora la reserva ovárica, antecedentes reproductivos y factores que pueden influir en la concepción, ofreciendo alternativas individualizadas para cada etapa de la vida reproductiva.
Evaluación de la salud íntima
Se aborda cualquier molestia ginecológica, incluyendo infecciones vaginales, sequedad, irritaciones o disfunciones sexuales, con un enfoque integral que combina diagnóstico clínico, pruebas complementarias y educación sobre higiene y cuidado íntimo.
Transición a la menopausia y salud postmenopáusica
La consulta incluye asesoramiento sobre cambios hormonales, síntomas asociados a la menopausia y prevención de enfermedades relacionadas, como osteoporosis, trastornos cardiovasculares o alteraciones de la piel y mucosas. La especialista puede establecer un plan de seguimiento y pautar tratamientos cuando sea necesario.
Acudir periódicamente a la consulta ginecológica proporciona múltiples ventajas para la mujer:
Prevención y detección temprana de enfermedades ginecológicas y mamarias.
Atención personalizada, ajustada a la edad, antecedentes médicos y estilo de vida.
Resolución de dudas sobre sexualidad, anticoncepción y fertilidad, en un entorno seguro.
Derivación a pruebas complementarias cuando es necesario, incluyendo ecografías, análisis hormonales o estudios de imagen.
Plan de seguimiento estructurado, que asegura control continuo y monitorización de cualquier alteración.
Estos beneficios permiten a las pacientes no solo cuidar su salud, sino también mejorar su bienestar físico, emocional y sexual, fortaleciendo la confianza en el autocuidado y la prevención.
La consulta suele desarrollarse en varias fases para garantizar un abordaje completo:
Historia clínica detallada
La ginecóloga recopila información sobre antecedentes personales y familiares, historial menstrual, embarazos previos, métodos anticonceptivos utilizados, cirugías o tratamientos previos, así como cualquier síntoma actual. Esta información es fundamental para orientar el diagnóstico y decidir si se requieren pruebas complementarias.
Exploración física
Incluye palpación abdominal, examen de mamas y revisión ginecológica, adaptada a la edad y necesidades de la paciente. La exploración permite detectar irregularidades, masas, dolor localizado o cambios en la anatomía que puedan requerir seguimiento o derivación.
Plan diagnóstico y terapéutico
Dependiendo de la evaluación inicial, se puede recomendar:
Analíticas de laboratorio para valorar hormonas, perfil lipídico, función tiroidea o marcadores específicos.
Pruebas de imagen, como ecografía pélvica o mamaria, para complementar el diagnóstico clínico.
Tratamientos específicos, que pueden incluir terapia hormonal, pautas para regulación menstrual, métodos anticonceptivos o recomendaciones para mejorar la fertilidad.
Educación y consejos personalizados sobre hábitos saludables, higiene íntima, nutrición, actividad física y prevención de infecciones.
Este enfoque integral asegura que cada paciente reciba un plan completo y adaptado a sus necesidades, con seguimiento continuado según la evolución de su salud.
Una de las ventajas de la consulta ginecológica es que, en la mayoría de los casos, no requiere cuidados posteriores específicos. Sin embargo, cuando se prescriben pruebas complementarias o tratamientos, la especialista proporciona instrucciones detalladas para:
Preparación y seguimiento de analíticas o estudios de imagen.
Administración de medicación o terapias hormonales.
Modificaciones en hábitos diarios que favorezcan la salud ginecológica y general.
Además, la consulta establece un programa de revisiones periódicas, que varía según la edad, factores de riesgo y antecedentes médicos, asegurando un seguimiento preventivo y proactivo.
El cuidado ginecológico regular no solo se centra en responder a síntomas existentes, sino también en prevenir futuros problemas de salud. La detección temprana de alteraciones hormonales, infecciones, pólipos o lesiones benignas permite actuar de manera precoz, evitando complicaciones y mejorando la calidad de vida de la paciente.
Asimismo, la consulta ginecológica es un espacio para educación sanitaria, donde se refuerzan hábitos saludables, técnicas de autocuidado y recomendaciones sobre sexualidad segura, métodos anticonceptivos y planificación familiar. Esto empodera a la mujer para tomar decisiones informadas sobre su salud a lo largo de todas las etapas de la vida.