Desde 300€
20min
Infiltración con ácido hialurónico específico mediante cánula fina en el surco periocular, diseñada para corregir la pérdida de volumen y suavizar la transición entre párpado inferior y mejilla.
Resultados inmediatos, naturales y armoniosos, con mejora en la apariencia de cansancio y sombras en el contorno de ojos.
Puede aparecer leve inflamación, enrojecimiento o pequeños hematomas que suelen remitir en pocos días.
El relleno de ojeras permite mejorar la apariencia del surco periocular mediante la reposición de volumen con ácido hialurónico, logrando un efecto rejuvenecedor sin cirugía. Este procedimiento corrige la transición entre párpado inferior y mejilla, suaviza sombras y disminuye la apariencia de cansancio, logrando una mirada más fresca y armoniosa.
Gracias a la precisión de la aplicación, se puede trabajar la zona delicada de manera segura, evitando sobrecargar el área y manteniendo un resultado natural que respeta la expresión facial.
El ácido hialurónico es un componente que atrae y retiene agua, proporcionando hidratación y volumen a los tejidos. Al aplicarse en el surco periocular, rellena el espacio hundido, corrige irregularidades y suaviza la transición entre párpado inferior y mejilla.
La técnica con cánula fina permite un tratamiento seguro, reduciendo el riesgo de hematomas y minimizando la inflamación, al mismo tiempo que facilita una distribución uniforme del producto y un acabado natural.
Además de mejorar la profundidad del surco y disminuir sombras, este tratamiento contribuye a:
- Restaurar la simetría y proporción del contorno ocular.
- Rejuvenecer la mirada sin alterar la expresividad facial.
- Hidratar la piel fina de la zona, mejorando la textura y luminosidad.
- Complementar otros tratamientos faciales para un rejuvenecimiento global.
Los resultados son inmediatos y progresivos, con efectos que se mantienen durante varios meses según el metabolismo y cuidados de cada paciente.
La sesión es ambulatoria y rápida, generalmente entre 20 minutos, sin necesidad de anestesia general. La aplicación mediante cánula fina permite acceder a la zona de manera precisa, minimizando molestias y logrando un acabado uniforme.
Se recomienda evitar frotar o presionar la zona tratada, así como la exposición a calor intenso, ejercicio extenuante o maquillaje durante las primeras 24-48 horas para optimizar los resultados y reducir la posibilidad de hematomas.
El relleno de ojeras debe realizarse siempre por personal especializado, utilizando productos específicos para la zona periocular. La personalización del tratamiento según el tipo de piel, profundidad del surco y características anatómicas asegura un resultado natural y seguro.
El procedimiento es mínimamente invasivo, permite retomar la rutina diaria de manera inmediata y proporciona una mejora notable de la mirada sin recurrir a técnicas quirúrgicas.
Los efectos del relleno de ojeras son visibles de inmediato, con un aspecto más descansado y luminoso en la zona tratada. La hidratación y el volumen aportados se integran de forma natural, corrigiendo hundimientos y suavizando sombras.
Para mantener los resultados, se recomienda un seguimiento periódico, que puede incluir sesiones de retoque según las necesidades individuales. Combinado con hábitos de cuidado ocular y facial, el tratamiento garantiza una mirada rejuvenecida y armoniosa durante meses.